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Fecha de publicación Octubre 04, 2017

Urgencia Viene de Urgente: El Triage (parte 1/2)

Por innecesario que parezca, para arrancar con este artículo es fundamental partir de la definición de la palabra Urgente. La RAE nos direcciona hasta la definición del verbo Urgir, que consiste en “Conducir o empujar a alguien a una rápida actuación” o “Instar o precisar a su pronta ejecución o remedio”. En cuanto a la palabra Urgencia, nos ofrece esta definición: “Sección de los hospitales en que se atiende a los enfermos y heridos graves que necesitan cuidados médicos inmediatos”.



Desde el punto de vista de cada paciente, hasta un moderado dolor de garganta ameritaría un cuidado médico inmediato, después de todo, ¿quiénes son los otros por muy profesionales que sean para calificar el dolor que uno siente?

Esa postura es perfectamente comprensible, y en un mundo ideal todos deberíamos ser atendidos de manera inmediata independiente de la gravedad de nuestro problema, pero ahí radica todo: en nuestro mundo real debemos priorizar debido a que disponemos de recursos limitados. Dicho de otra forma, hay cosas que pueden dar espera y otras que no y, en el panorama total, eso solo lo saben los profesionales que realizan el triage.

¿Pero Qué es el Triage?

Hace un tiempo asistí a una consulta por urgencia por una razón que para mí era digna de recibir una atención rápida, y me sorprendí al ver que el médico simplemente me despachó con algo para el dolor y con una tarea: llamar al día siguiente a mi EPS para que me asignaran una cita prioritaria (en ese momento desconocía la diferencia entre esto y la urgencia).

Con el tiempo supe que la frustración de no recibir una atención en el acto no era sólo mía y que muchos otros usuarios eran víctimas del desconocimiento y la falta de educación de un sistema que sólo estaba procurando darle un orden al servicio, partiendo de la idea de priorizar según la gravedad de cada paciente, esto mediante un sistema de clasificación denominado Triage (término que en francés significa clasificación).

De forma simple, el Triage - reglamentado en Colombia desde el 24 de diciembre de 2015 por la resolución 5596, clasifica los pacientes que llegan a una sala de Emergencias en una escala del 1 al 5, correspondiendo el 1 a aquellos usuarios que presentan riesgo inminente de muerte (infartos, paros cardiacos, derrame cerebral), mujeres que están dando a luz, entre otros muchos casos de vida o muerte. Del nivel 1 al 5, la gravedad va disminuyendo.

Es importante comunicar que cada nivel de Triage tiene unos tiempos estipulados de atención y es mucho más valioso destacar que desde la Clínica Universitaria Bolivariana no sólo cumplimos con esos tiempos sino que elevamos el estándar, con tiempos de atención inferiores a los que exige la Ley: por ejemplo, mientras que un paciente “triage 2 se debería atender por ley antes de los 30 minutos, nosotros lo estamos atendiendo en un promedio de 7”, afirma el Doctor Theider Jovany Serna Jiménez , Coordinador de Emergencias de la Clínica Universitaria Bolivariana.

Clic para leer la segunda parte de este artículo