Clinica Universitaria Bolivariana offers health services with an emphasis on high and medium- complexity, and under a model of care focused on satisfying the needs and expectations of patients and their families, guaranteeing high standards of quality and safety.
La Clínica Universitaria Bolivariana ofrece servicios de salud con énfasis en alta y mediana complejidad y bajo un modelo de atención centrado en la satisfacción de las necesidades y expectativas de sus pacientes y sus familias, garantizando altos estándares de calidad y seguridad.
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Fecha de publicación Septiembre 04, 2024
Los probióticos son microorganismos vivos que se encuentran en ciertos alimentos o suplementos y que, cuando se ingieren en cantidades adecuadas, ejercen efectos beneficiosos para la salud. Estos microorganismos forman parte del microbiota intestinal, una comunidad compleja de bacterias que habitan en nuestro intestino y que desempeñan un papel fundamental en diversas funciones corporales, como la digestión, la absorción de nutrientes, la regulación del sistema inmunológico y la producción de ciertas vitaminas.
Los probióticos actúan como aliados de nuestro intestino al mantener el equilibrio del microbiota intestinal, lo que a su vez contribuye a prevenir o mejorar una gran variedad de enfermedades, como la diarrea, el estreñimiento, las alergias, las enfermedades inflamatorias del intestino y algunas enfermedades autoinmunes.
Yogur natural: El yogur natural es una de las mejores fuentes de probióticos, especialmente aquellos que contienen cultivos vivos de Lactobacillus y Bifidobacterium.
Kefir: El kéfir es una bebida fermentada de leche que contiene una gran variedad de probióticos beneficiosos.
Chucrut: El chucrut es un repollo fermentado que es rico en probióticos, especialmente en Lactobacillus.
Existen suplementos de probióticos que pueden ser útiles para aquellas personas que no consumen suficientes alimentos ricos en probióticos o que tienen problemas intestinales. Sin embargo, es importante consultar con un profesional de la salud antes de tomar cualquier suplemento probiótico, ya que no todos los suplementos son iguales y algunos pueden no ser adecuados para todos.
Diarrea: Los probióticos pueden ayudar a reducir la duración y la gravedad de la diarrea, especialmente la diarrea causada por rotavirus o antibióticos.
Estreñimiento: Los probióticos pueden ayudar a aumentar la frecuencia de las evacuaciones intestinales y a ablandar las heces en personas con estreñimiento.
Alergias: Los probióticos pueden ayudar a reducir los síntomas de las alergias, como el eccema y la rinitis alérgica.
Enfermedades inflamatorias del intestino: Los probióticos pueden ayudar a reducir la inflamación y los síntomas de enfermedades inflamatorias del intestino, como la enfermedad de Crohn y la colitis ulcerosa.
Algunas enfermedades autoinmunes: Los probióticos pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollar algunas enfermedades autoinmunes, como la diabetes tipo 1 y la artritis reumatoide.
La cantidad recomendada de probióticos varía en función de la edad, la salud y las necesidades individuales. Sin embargo, en general, se recomienda consumir alimentos ricos en probióticos o suplementos probióticos a diario. Es importante elegir productos probióticos de alta calidad y que contengan cepas de probióticos bien documentadas por su eficacia.
- Evitar el uso indiscriminado de antibióticos, no automedicarse, siempre consultar al personal de la salud.
- Evitar una dieta alta en procesados o ultra procesados, preferir dietas altas en fibras, ejemplo, un consumo de al menos 5 porciones diarias de frutas y verduras
- Tener una correcta hidratación, puede ser con agua o saborizarla con gotas de limón o trozos de fruta, si no les gusta el agua sola.
- Buscar alternativas diferentes para manejar el estrés, como ejercicio, o actividades que les guste, pintar, bailar, tejer, hacer yoga. Recuerden que el estrés genera que el sistema nervioso del que depende la función del intestino, haga que funcione de manera incorrecta y va a favorecer que la microbiota se altere.
- Recuerden tener un descanso reparador, dormir bien.
- Evitar el uso de desinfectantes, querer que todo esté estéril también acaba con la microbiota que puede estar presente de forma natural en los alimentos
- Evitar fumar y el uso frecuente de alcohol, ya que también altera la microbiota
- La falta de ejercicio también contribuye con esta alteración, porque hay bacterias que contribuyen para el eje de la microbiota - músculo, que es un tema muy interesante. La recomendación de la OMS es tener entre 60 minutos de 2 a 5 días a ala semana de actividad física.
Agradecemos a Rosa Maria Morales, Gil Nutricionista de la Clinica y Saray Restrepo Bracamonte, estudiante de Nutrición de la Universidad de Antioquia, por tan valiosa información.