Clinica Universitaria Bolivariana offers health services with an emphasis on high and medium- complexity, and under a model of care focused on satisfying the needs and expectations of patients and their families, guaranteeing high standards of quality and safety.
Welcome to Clinica Universitaria Bolivariana; we feel very proud that you and your family have chosen us. You are very important to us and that is why we strive to provide you with high quality, scientific, human, and very safe care.
Being one of the few Accredited Institutions in Health in Colombia, the Clinica Universitaria Bolivariana is proactive in generating an exclusive space for its International Patients, seeking to strengthen its relationship with them through the information of interest. Thanks for choosing us.
La Clínica Universitaria Bolivariana ofrece servicios de salud con énfasis en alta y mediana complejidad y bajo un modelo de atención centrado en la satisfacción de las necesidades y expectativas de sus pacientes y sus familias, garantizando altos estándares de calidad y seguridad.
Bienvenidos a la Clínica Universitaria Bolivariana, nos sentimos muy orgullosos de que usted y su familia nos hayan escogido. Ustedes son muy importantes para nosotros y por eso nos esmeramos por brindarle una atención con alta calidad científica, humana y muy segura.
Si conoce la Visión de la Clínica, sabrá que su objetivo, para el 2019, es ser reconocida a nivel internacional como Hospital Universitario. Es por esta razón que la Unidad de Docencia e Investigación es fundamental para la Institución. Bienvenidos.
Siendo una de las pocas Instituciones Acreditadas en Salud en Colombia , la Clínica Universitaria Bolivariana es proactiva en generar un espacio exclusivo para sus Pacientes Internacionales, buscando fortalecer su relación con ellos a través de información de interés. Gracias por preferirnos.
Fecha de publicación Marzo 01, 2019
Redacción- Organización Panamericana de la Salud
La Organización Panamericana de la Salud (OPS) instó a los países de la región a prepararse y estar listos para dar una respuesta oportuna a posibles brotes de dengue, una enfermedad que es endémica en la región y que desde su reintroducción en la década de 1980 ha causado brotes y epidemias de manera cíclica cada tres a cinco años.
En 2010, se produjo la primera epidemia de dengue que superó el millón de casos en la región, y tres años después, en 2013, se presentó la primera epidemia con más de dos millones de casos. A inicios de 2019 se observa un aumento de casos comparado con el mismo período de 2018.
“El dengue es la infección viral transmitida por mosquitos de mayor propagación en las Américas y su complejidad ha ido aumentando con los años debido a varios factores, como el crecimiento urbano no planificado, problemas de agua y saneamiento, el cambio climático y ambiental y la circulación simultánea en algunos países de los cuatro tipos del dengue, que aumenta el riesgo de que se presenten casos graves y ocurran brotes” afirmó
Marcos Espinal, Director del Departamento de Enfermedades Transmisibles y Determinantes Ambientales de la Salud de la OPS.
Según la última actualización epidemiológica de la OPS sobre dengue publicada el 22 de febrero, el año pasado se notificaron 560.586 casos de dengue en las Américas, incluidas 3.535 casos de dengue grave y 336 defunciones. En tanto, en las primeras seis semanas del 2019 se notificaron casi 100.000 casos de dengue, incluidos 632 casos de dengue grave y 28 defunciones.
Las principales recomendaciones de la OPS se centran en que los países intensifiquen la vigilancia de la enfermedad, así como las medidas de control de vectores para reducir la población de mosquitos que pueden transmitir. Hoy por hoy, el único método para controlar o prevenir la transmisión del virus consiste en luchar contra el Aedes aegypti, el principal mosquito vector.
La Organización Panamericana de la Salud también recomienda educación continua a la población e involucramiento de la comunidad, así como asegurar que los profesionales de salud estén capacitados para diagnosticar el dengue y otras arbovirosis, y para manejar adecuadamente a los pacientes. La OPS presta cooperación técnica a sus Estados Miembros para prevenir y controlar la enfermedad.
Espinal explicó que el diagnóstico oportuno de la enfermedad se complejizó con la llegada de dos nuevos arbovirus: el virus Chikungunya en 2013 y el del Zika en 2015, al presentar una sintomatología similar. Sin embargo, y a pesar de la introducción de estas nuevas arbovirosis, el dengue ha sido la que presentó mayor número de casos.
Entre chikungunya, Zika y dengue, este último es además la arbovirosis de mayor letalidad, pero su tratamiento es relativamente sencillo, poco costoso y muy eficaz para salvar vidas.
“La clave es reconocer precozmente los signos de alarma para brindar la atención requerida y prevenir que progrese a formas graves” dijo José Luis San Martin, asesor regional en dengue de la OPS.
Consulta más información sobre este tema en el sitio web de la Organización Panamericana de la Salud.
Créditos de la fotografía: Oregon State University